Sin novedad en el frente

Los días van transcurriendo tranquilos sin grandes novedades en el comportamiento de Luna y Lorenzo. Luna entra en crisis una o dos veces al día, y Lorenzo no, pero todo se andará. Se aprende lo bueno y lo malo.
Ayer empezamos la tanda de vacunas. En principio parecía que se iba a librar, ya que venía con su cartilla de vacunaciones de China en regla, pero en los análisis de sangre salió que una de las que debía tener puestas, no la tenía, así que el pediatra ha preferido curarse en salud y revacunarlo. Las de ayer le han dado fiebre, así que lo tenemos un poco pocho. Hasta el mes que viene no toca la siguiente. También tenemos fecha con maxilofacial en el infantil, en Zaragoza, para finales de septiembre, y estamos esperando la fecha de traumatología. No obstante, el chavalote está bien de salud, los análisis han salido todos bien, así que estamos contentos.
Esta mañana Chema ha estado media hora larga charrando con la trabajadora social que llevó los seguimientos de Luna. Aunque no le toca a ella hacer los de Lorenzo, nos orientó cuando hicimos el cambio a Pasaje Verde (adopción de niños chinos con necesidades especiales) y nos apetecía contarle cómo nos iba yendo. Se ha alegrado mucho de nuestra llamada, y de paso, le hemos preguntado cuándo es bueno que Lorenzo vea las fotos de su familia de acogida. Este era un tema en el que teníamos muchas dudas. No sabíamos si era mejor enseñárselas ya o dejarlo para más adelante. Su consejo ha sido esperar, por lo menos un año, a que el vínculo entre Lorenzo y nosotros se consolide. Ahora, en su opinión, confundiría más al crío que ayudarle. Lo hemos hablado con Chema y estamos de acuerdo, así que guardaremos las fotos para más adelante. También nos ha recordado lo importante que es que estemos mucho tiempo con el, y que estemos vigilantes cuando empiece el colegio. De momento, más tiempo de dedicación es imposible...todo el día los 4 juntos¡¡¡¡ Ya llegará septiembre e iremos viendo cómo va tomando la "separación".
El viernes bajamos a las fiestas de Pallaruelo, así que pronto tendréis la ansiada foto bisabuela-biznieto chinorri.
Por cierto, Luna ya mide 107 cm. y Lorenzo ha crecido un centrímetro desde que lo recogimos, casi 101.
Y por último, contaros que fuimos hace un par de días a cenar al Asia, un restaurante asiático al que vamos de vez en cuando, para ver si es posible encontrar a un chino-a que esté una o dos horas a la semana con Lorenzo, y así pueda mantener el idioma. La mujer del dueño es una chica encantadora que estuvo hablando con el bastantes ratos...y nos reíamos porque cuando el preguntó qué comida le gustaba más, Lorenzo dijo: pan y jamón. Toma ya :-))))
Seguiremos informando.
Un besico grande
Mariajo