domingo, 4 de julio de 2010

El Dragón de Tianjin y la Gran Muralla


Amigos, familia…os anuncio que Peña Guara tiene un futuro escalador en ciernes…Lorenzo Usieto Barlés. Hoy en la Gran Muralla nos ha dejado anonadados. Hacía un calor espantoso, Luna en el primer tramo ha dicho que media vuelta, Chema y Lorenzo iban por delante y los hemos perdido al poco, pero es que el enano casi subía los escalones de dos en dos. Os aseguro que no es moco de pavo, porque el tramo visitable es tremendamente empinado y para más dificultad, no hay dos escalones iguales, unos son muy bajos y otros muy altos. Si sumamos a eso más de 35 grados a pleno sol…el tema se pone complicado para un crío de 4 años. Pero no para el Dragón de Tianjin. Han llegado los dos chupidos de sudor con una botella de agua y otra de Nestea. Me ha extrañado que Chema pidiese un Nestea, pero no…resulta que al llegar arriba (donde muy oportunamente hay un garito de bebidas, que me pregunto yo con qué ánimo sube el gerente del garito las bebidas hasta allí), Chema le ha dicho a Lorenzo que si quería agua, y va el tío y le dice que agua no, que te. Y en concreto, señala la botella de Nestea. Ole mi chico, a falta de Aquarius qué mejor que una bebida con te y azúcar para recuperar fuerzas. A la vuelta en el bus todos los críos se han dormido, menos Lorenzo, faltaría más, el dragón todavía tenía cuerda para rato. No me extraña que esté en los huesos.
Luna está encantada con sus nuevas amigas, las hijas de las otras dos familias que nos acompañan en Beijing, y un poco menos encantada con su hermano. La agobia y entra en crisis. Hoy a las 8 o así, después de repasar el papeleo con la guía, hemos ido hasta un centro comercial paseando y por fin, Luna ha dejado que su hermano le cogiese de la mano. Esto ha cambio de un regalito, una diadema hiper hortera que para más INRI me ha costado 13 euros. Olvidaos de la imagen de una China barata, la que estamos encontrando está más cara de lo previsto.
Mañana toca madrugar para ir al consulado a hacer papeles, luego nos llevarán a pasear por los alrededores de la Villa Olímpica y a una fábrica de seda. A ver qué tal se nos da el día… porque si la Gran Muralla no ha tumbado a Lorenzo….
¿No conoceréis algún gimnasio de judo o así para niños de 4 años? Jejejej
Besitossssssssssssss