Llegó el momento. Ya somos 4…¿o debería decir 27? por que el tío de mueve más que los precios¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ Ha ido todo de maravilla, nos lo ha puesto fácil. Al principio ha entrado serio, y se quería ir, pero no lloraba, así que hemos sacado los regalitos. Compramos una especie de pincho con aros para encestar y hemos empezado a jugar, y nos ha regalado la primera sonrisa. También le ha gustado mucho el coche de playmobil que le traíamos. Venía con una bolsa con los álbumes de fotos que le mandamos y los juguetes, un diario escrito por su madre de acogida y las cámaras de fotos que le enviamos y que tenemos que revelar. También hay un pequeño álbum de fotos con su familia de acogida que de momento hemos guardado para que no se ponga triste.
Es muy activo y muy espabilado. Está pegado a Luna todo el rato. Fijaos, llevaban media hora juntos y nos han llevado a comisaría a gestionar el pasaporte y Luna tenía pis. Así que hemos bajado al baño. Cuando hemos vuelto lloraba y ¿sabéis a quien llamaba?, a su hermana….”jiejie” (chiechie) decía, que es hermana mayor en chino.
En la entrega había otra pareja italiana, y lo han pasado fatal porque el niño, de unos 3 añitos, lloraba muchísimo. A la salida, me ha abordado una mujer que me decía en inglés que era la hermana del niño y que sabía que lo iba a cuidar, lloraba amargamente…la he abrazado y le he dicho que estuviese tranquila...pero me he dado cuenta de que Lorenzo no la conocía y es que era la hermana de acogida del niño de la pareja italiana. Durísimo.
En el hotel le hemos enseñado sus zapatos nuevos y rápidamente se los ha puesto, y la ropa igual, él solito y con muy buena maña. Le encanta hacer fotos, así que estamos posando cada poco. Con las pegatinas también ha estado un buen rato con Lu jugando. La gorra que me distéis Miguel-Chona, un éxito…se la pone y se la quita todo el rato. Hemos ido a comer al mcdonalds que está justo debajo del hotel por no enredar buscando por ahí. Se sabía el mcdonalds de memoria, nos ha dicho dónde estaban las pajitas y el baño, no ha parado ni un minuto, se ha dedicado a colocar las sillas de las mesas correctamente y todo esto comiendo como una lima, patatas, carne, y nuggets. A Lu lo del mcdonalds ni frío ni calor, pero bueno.
De su labio la verdad que muy muy bien, está muy bien operado, se le nota la cicatriz y la expresión que tienen los niños con este problema, pero poco más. No nos ha dejado verle la boca por dentro, pero creemos que el paladar también está operado porque come de todo y bebe con pajita sin problema. Habla mucho, la guía nos dice que se le entiende bien y el tío como repite todo lo que hace su hermana, ya anda diciendo “biennnnn” cuando acierta en los juegos. Eso sí, se les ha “olvidado” poner en el informe médico que tiene una pierna “chunga”, la izquierda, el pie lo tiene un poco metido hacia dentro y lo arrastra un poco al andar, se nota bastante el defecto, así que nos van a hacer un bono en la consulta de la Mozota No penséis que anda con dificultad, de eso nada, anda y corre como una máquina, salta las escaleras de 4 en 4 y es tremendamente habilidoso con el cuerpo, pero una pierna no es normal. Yo ya me temía que con el recorrido que llevamos Chema y yo, tan perfecto no podía ser…pero nada, que nos van los niños especiales, y Lorenzo no podía ser menos.
Está muy bien educado, dice “xie xie” (gracias), cuando le damos galletas le da una primero a su hermana, y si abre algo, el papel lo deja en la papelera. Se lava las manos antes de comer y es muy autónomo.
Por lo demás, se confirman nuestras sospechas: es el dragón de Tianjin, las fotos no engañaban¡¡¡¡¡ es movido, inquieto y simpaticón. Chema se entiende bastante bien con el en chino y yo….hago lo que puedo, pero de verdad que para las horas que llevamos con el está el tío como una rosa. Antes han estado contando los dos en chino, y cuando terminan del 1 al 10 aplauso y “biennnnn”.
En fin, que estamos contentos, seguimos con el miedo en el cuerpo porque Luna es muy tranquila y éste de tranquilo tiene poco, y claro, nos falta costumbre, pero todo se andará. En el mcdonalds se nos ha ido por una puerta a la calle y ha vuelto por la otra muerto de risa el jodío, eso Luna, ni aunque la obligues. Ahora mismo, chema está jugando con el a contar los aros del juego de lanzar, y Luna está viendo dibujos animados en chino…¿no debería ser al revés?, pues no, él que los entiende los ignora, y Luna que no entiende ni papa, ahí está. Madreeee, qué entretenido es esto de tener dos hijos.
Bueno, os dejo, igual chema os escribe algo sobre sus impresiones. Yo estoy contenta, creo que mis ángeles se han portado (gracias papá, gracias Lucas), y que toda vuestra energía positiva/oraciones/buenos deseos han llegado hasta la lejana China. Ya somos cuatro. Y como le digo a Luna, en nuestra casa todos somos adoptados, hasta el perro, y todo el que entra, lo hace para quedarse. Somos una familia unida por hilos rojos, hilos que pueden enredarse y tensarse, pero que nunca, nunca, se rompen.
